Un vecino de la localidad fue condenado a pagar más de 65 millones de pesos por los daños causados a su hijo y a la madre a raíz de su omisión en reconocer el vínculo biológico.
La decisión fue adoptada por la jueza de Familia, Eliana Fortbetil, quien enfatizó el derecho a la identidad del niño y calificó la conducta del padre como una forma de violencia simbólica, psicológica y económica.
El caso comenzó con una demanda presentada por la madre del niño, de 9 años. En la presentación, la madre explicó que, aunque el hijo llama “papá” al hombre, este recién lo reconoció formalmente al iniciar la acción judicial. Además, señaló que, tras perder su empleo, no puede afrontar la atención médica especializada que requiere su hijo, diagnosticado con trastorno del espectro autista.
La magistrada destacó que los derechos humanos fundamentales del niño, como el derecho a la familia, al conocimiento de sus orígenes y a la identidad, habían sido vulnerados.
Asimismo, la jueza subrayó la importancia de juzgar con perspectiva de género, señalando que la conducta del padre, “reticente y pasiva previa”, reflejaba un desplazamiento de responsabilidades parentales y una posición de poder sobre la madre desde antes del nacimiento del niño.
Para determinar la indemnización, Fortbetil calculó el 100% de la canasta de crianza del INDEC para la franja etaria de 6 a 12 años y lo multiplicó por los meses de vida del niño, considerando también el daño al proyecto de vida del menor, con consecuencias duraderas.
El fallo incluyó medidas preventivas y de cuidado reforzado. El padre deberá continuar abonando la cuota alimentaria durante seis meses y cubrir totalmente los gastos médicos y terapéuticos que el niño requiera durante ese mismo periodo.
Como detalle particular, la jueza también incorporó un cuento explicativo adjunto al fallo para que el niño pueda entender la decisión en un lenguaje claro, asegurando así un verdadero acceso a la justicia. La sentencia pone el foco en la responsabilidad parental integral, tanto en lo económico como en lo afectivo.






